Las Navidades de un deportista

¿Cómo deberían ser?

Primero de todo aclarar que lo que voy a contar aquí no está basado en ningún estudio, ni teoría, tan solo es mi opinión y visión de la escasa experiencia de la que parto. Vas a encontrar aportaciones que creo que pueden ser útiles a la ahora de afrontar un parón por vacaciones, en este caso, por Navidad.

Antes de nada es imprescindible partir de que no todos los deportistas están bajo la misma intensidad, presión y nivel deportivo, por lo que el enfoque de las Navidades debería ser diferente. Habrá equipos de mayor nivel que no podrán permitirse dejar de entrenar. Si es así, cada rato que tengas libre, trata de hacer algo totalmente diferente a lo que harías normalmente.

Estas líneas están destinadas sobre todo a quien deja de entrenar. Aunque, hay información interesante para ambos grupos.

Creo que todos deberíamos tomarnos las navidades como unos días de desconexión y reflexión, sin dejar nuestras rutinas de cuidado atrás. Quiero decir, las Navidades coinciden con el fin del año, lo que siempre nos hace pensar sobre que hemos hecho durante el trascurso de este. Como deportistas tan solo van unos meses de la nueva temporada, pero estos ya pueden darnos una idea de como podría ir el resto de la temporada. Usar un ratito de estas navidades para reflexionar sobre que has hecho y como te encantaría enfocar el año que viene, a nivel deportivo y personal, sería una muy buena forma de usar estas vacaciones.

La necesidad de la desconexión vendrá de la intensidad y estrés del día a día. Aquel que entrene todos los días 6 horas necesitará una mayor desconexión que el que entrena 2 horas cada tres días. No obstante, la carga mental y psicológica puede ser igual en ambas partes. Este post no quiere ser solo una recomendación para deportistas, sino también para el cuerpo técnico, especialmente para entrenadores.

Un entrenador siempre tiene en la cabeza a su equipo, el cómo mejorar, qué hacer y qué trabajar para unir y potenciar al grupo. Prepara entrenamientos, trabaja técnica, preparación física, hace de psicólogo y a parte lleva su vida personal. Para el/ella este parón es igual de necesario que para cualquiera de sus deportistas.

Como dije antes, la idea principal que me gustaría que te llevaras de este post, es que desconectes para poder volver con un mayor enfoque a la vuelta. Desconectar, para mi, no es olvidarte de que eres deportista. Todo lo contrario, es no dejar de recordártelo. Como deportista cada mal hábito tendrá un gran impacto en tu condición física y eso debilitará tu rendimiento. Por lo tanto, olvidarte de que eres deportista podrá hacerte recurrir a una nueva pretemporada a la vuelta, afectar a tu juego y al de tu equipo.

Tampoco creo que el extremo contrario sea del todo sano, seguir manteniendo tu vida de deportista. ¿Qué quiero decir con esto? Que es necesario desconectar un poco, disfruta de tu familia, tus amigos, saca un rato de tu mente tu deporte y haz cosas que en tu día a día no puedes hacer. Mantén tu cuidado, pero no te limites como lo harías en mitad de la temporada. Sigue haciendo deporte, eso te ayudará a mantener tu estado físico, y a liberar todo el estrés acumulado. Haz otra actividad que no tenga relación con tu disciplina pero sigue en movimiento.

Los parones por vacaciones pueden hacerte perder condición física, atendiendo a velocidad, fuerza, flexibilidad y puede debilitar tus automatismos y gestos de tu deporte. Esto no quiere decir que por unos días de vacaciones se te olvide jugar, no, claro que no. Pero si pueden hacer que pierdas algo de soltura y fluidez, sobre todo si te encuentras en un aprendizaje técnico.

Las Navidades, las comidas copiosas, las bebidas alcohólicas y el trasnoche vienen de la mano. No seré yo quien te invite a comer mal, beber alcohol, ni a limitar tu descanso. Pero si soy consciente de que las nuestras relaciones nos incitan a hacerlo. Al ser deportista, esta serie de eventos no forman parte de tu día día y puedes sentirte muy tentado por sumergirte en ellas. Sé flexible, que un día te tomes un polvorón no afectará a tu condición física, y podría ayudar a tu flexibilidad cognitiva. Esto no quiere decir, que te descuides y te pases las Navidades atiborandote de alfajores, eso sí dañará tu estado físico.

Por lo tanto, a modo de resumen, y como posible guía para pasar unas Navidades sin que te pesen demasiado a la vuelta:

  • Desconecta, permítete pensar y hacer cosas que no haces en tu día a día
  • Cuidate, concedete algún capricho, pero no te olvides de tu salud
  • Sigue activo, haz rutinas cortas de flexibilidad y/o fuerza
  • Sé flexible con tu alimentación y tu entrenamiento
  • Implícate en cuidarte y descansar
  • Sé consecuente con cada mal hábito
  • No te culpes, ni castigues si te pasas con alguno de ellos
  • Reflexiona sobre que has hecho y que quieres hacer en el año que viene
  • Establecete objetivos a nivel deportivo y personal

Estamos en Navidad y eso quiero decir vuelta a casa, ver a la familia y amigos. Disfruta de ellos, disfruta de ti, con ellos. Cárgate la pilas, cuida tu estado físico y mental. Márcate nuevos objetivos que te permitan volver en enero con todas las ganas del mundo.

Y tú, ¿qué vas a hacer para que las Navidades no debiliten tu rendimiento? Te leo en los comentarios.

Feliz Navidad y Prospero Año Nuevo

Mar Durán 🎄 La Catalizadora Deportiva

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