Pensamiento y rendimiento deportivo

Cuando se habla de pensamiento se hace referencia a todo aquello, que pasa por la mente de forma consciente. Estos pensamientos pueden desarrollarse por creencias, expectativas, imágenes, sensaciones internas o situaciones externas. Todo pensamiento que interfiera en el aprendizaje o ejecución de una habilidad deportiva la volverá ineficaz, ya que la atención estará en el pensamiento y no en la situación.

Nuestras creencias infunda valor a nuestras expectativas que serán las encargadas de interpretar la situación y realizar una respuesta, cognitiva o comportamental, acorde a lo que se crea e interprete.

Por lo tanto, según el tipo de creencias que tengamos hacia nosotros y nuestro desempeño se realizará todo lo demás. Si desde pequeño siempre pienso que no sirvo para nada o que nada me sale bien, mis expectativas frente a una situación deportiva serán bajas, creeré que no sé hacerlo. A menudo damos por hecho las creencias que rondan por nuestra cabeza, las tenemos como realidad y rara vez cuestionamos si eso que pensamos se trata de algo realista o no.

Nuestras creencias y expectativas son parte de nuestro sistema inconsciente. Ambas subyacen en nuestro interior de forma estable y determinada. Están construidas según las experiencias y conocimientos de las que disponemos hasta hoy. Los pensamientos si se tratan de ideas conscientes, que se elaboran a partir de las inconscientes.

Y, ¿cómo afecta esto al rendimiento deportivo? Según sea la creencia y la interpretación sobre mi, me afectará de forma positiva o de forma de negativa. Por ello, lo primero será analizar y evaluar nuestros pensamientos a través de nuestras interpretaciones y creencias.

El cerebro siempre busca confirmar eso que cree. Si crees que no puedes, tu cerebro hará lo posible para que esta hipótesis se confirme. Si a esto le añadimos que las creencias son inconscientes, podemos estar convirtiéndonos en nuestro mayor obstáculos sin saberlo.

La importancia de detectar nuestras creencias dentro del deporte, adquiere mucha relevancia. Podemos estar no rindiendo a nuestro máximo nivel por eso que tenemos rígido en nuestro cerebro. Puede ser que si tengamos las habilidades deportivas necesarias pero no nos permitimos (de forma inconsciente) sacarlas a la luz. Para traer estas ideas a nuestra parte consciente solo podemos hacerlo a través los pensamientos. Y de eso mismo, trata la actividad que te comento en las siguientes líneas.

A continuación te traigo un ejercicio donde la idea es realizar un análisis sobre interpretaciones, expectativas, creencias y pensamientos sobre una situación determinada. La intención es llevar a la conciencia esas creencias que de forma determinada nos hacen interpretar la situación de una forma que no siempre nos beneficia.

Quiero, que recuerdes tu último error grande durante un partido o algún fracaso deportivo que te retumba aún. Ahora coge papel, boli y sin pensar mucho, escribe lo siguiente:

  • Situación. ¿Dónde era? ¿qué ocurrió? ¿quienes había allí? Quiero que hagas un resumen de todo eso que recuerdas sobre ese momento.
  • Pensamientos. Recuerda qué se te pasó por la cabeza y que respuesta le siguió a esos pensamientos, ¿cómo te sentías? Escribe todo lo que recuerdes a nivel de pensamiento y cuales de ellos te hicieron actuar.
  • Interpretación. ¿Qué y cómo lo has interpretado para tomar esa repuesta? Cual fue la traducción que hiciste tras ese evento que hizo actuar o no. Añade todas las ideas que recuerdas sobre como analizaste aquel momento.
  • Expectativas. Sé sincero, ¿qué esperabas de la situación? ¿crees que esa expectativa influyó en tu acción y tu pensamiento? Escribe tus ideas previas, lo que deseabas sobre ese encuentro, ¿tu idea antes de llegar ha podido modificar la situación?
  • Creencias. Escribe sin pensar, lo primero que se te venga a la mente tras las siguiente pregunta: ¿crees que alguna de tus ideas fijas ha podido tener relación con ese momento?, ¿crees que hay algo que deberías hacer/tendrías que haber hecho?

Una vez tengas esto, quiero que en otra hoja diferente expongas la alternativa que podrías elegir para cada uno de estos aspectos. Escribe al lado, esas creencias sanas que podrían ayudarte a elaborar una expectativa realista e interpretar la situación de forma adecuada para mantenerte en el partido.

Una vez redactadas las alternativas, quiero que releas todo y en el próximo partido trates de identificar alguno de estos pensamientos, te ayudarán a ver que tipo de creencias están interpretando lo que te ocurre.

Identificar tus pensamientos y la parte inconsciente que los crea, te va a dar la oportunidad de concentrarte en eso que tienes que hacer dentro del juego y dejar a un lado todo tiempo de pensamientos que te sacarán de tu atención a la bola.

Quiero que a partir de hoy, cada vez que creas que tienes una mal día, una mala situación o un mal partido te hagas la siguiente pregunta: ¿de qué otra forma puedo verlo?

Envíame un mensaje por Instagram a @mardurannn o un email a lacatalizadoradeportiva@gmail.com si crees que puedo ayudarte a traer a la superficie esas creencias limitantes que no permiten confiar en ti.

Tu post de cada lunes, nos vemos la semana que viene😏

Mar Durán 🚀 La Catalizadora Deportiva

Buceta, J.M. (2020) Psicología del Deporte de Alto Rendimiento. Barcelona, España: Editorial Dykinson, S. L.

Deja un comentario